Crítica de Robocop

Tras leer y escuchar varias críticas positivas de la nueva película de Robocop, finalmente me animé a acudir al cine para ver si de verdad el reboot del clásico de Verhoeven merecía la pena. Es una de esas películas con las que entras con miedo, siendo admirador de la clásica y sabedor también de las bazofias que se han hecho “revisando” cintas clásicas, debo decir que la cinta de Jose Padilha me ha sorprendido gratamente y me obliga a reconocer que estaba en un error al prejuzgar la cinta, añado además que al salir del cine me he tenido que tragar con patatas todos los comentarios negativos que previamente le había arrojado.
Esta nueva versión del personaje es sencillamente estupenda, no es que me haya gustado, es que me ha encantado y no porque sea buena o mala película sino porque la misma es una versión completamente nueva de una historia que en su día funcionó fenomenal y que en la actualidad funciona mejor. Todo ello, y esto es muy importante, respetando la cinta original.
Creo sinceramente que el hecho de que la película me haya gustado tanto se sustenta en varios puntos al margen del argumento. En primer lugar, se nota que Jose Padilha ha visto la película original y ha sido conocedor de la importancia que tiene en el cine de acción y en los fans, por ello el producto final que ha firmado reúne todas las características principales que funcionaron en la película de Verhoeven fundiéndolas con un nuevo e interesante punto de vista, pero respetando la base argumental y es que es una historia lo suficientemente diferente como para no ser un remake y a su vez es una historia lo suficientemente similar como para ser un reboot.
En segundo lugar toda la película está plagada de guiños y gags que recuerdan aquella cinta de 1988, nombres, diálogos, secuencias y por supuesto, el mayor de los aciertos, recuperar el tema mítico de Basil Poledouris con el cual arranca la película motivándote a tope.
En tercer lugar, y aludiendo al respeto hacia la original que citaba anteriormente, la película recupera uno de los recursos que siempre más me han gustado en el cine de Paul Verhoeven, que es el hecho de recurrir a la televisión como instrumento de manipulación de los ciudadanos, entonces con anuncios e informativos y en esta nueva versión con un programa sensacionalista que se engrandece ante la buena interpretación de Samuel L. Jackson como fanático presentador del mismo.
En cuarto lugar, por supuesto, y es que hay que mencionarlo porque es de justicia, las interpretaciones han sido espléndidas. Todo el reparto, ya de por sí suficientemente atractivo y adecuado para que la película funcione, realiza unas interpretaciones geniales. Michael Keaton como villano del film está sensacional; por otro lado Gary Oldman borda el papel de científico que se debate entre la ética, la fidelidad a la empresa y las ganancias; por otro lado y no menos importante está Joel Kinnaman, protagonista que recoge con maestría el testigo de Peter Weller y aporta al personaje una riqueza y complejidad mayor que la que tenía el Alex Murphy de Verhoeven. 
Todo el reparto restante cumple perfectamente, por un lado el compañero de Alex Murphy, Jack Lewis, (llamado así en alusión a un nuevo homenaje a la cinta original en la que la compañera del policía robot era Anne Lewis, interpretada entonces por Nancy Allen); y por el otro lado tenemos a Abbie Cornish como Clara Murphy, mujer del malogrado policía. Los secundarios y la intervención de Samuel L. Jackson como alivio de la tensión y acción de la película, completan de forma correcta el elenco.
En cuanto al argumento de la película, antes comentaba que era diferente pero a la vez semejante, ¿Cómo puede ser esto posible? Muy fácil, la base de la historia es la misma y se respeta prácticamente hasta el final sirviendo además como una especie de “origen” del personaje; pero el desarrollo de la historia es más completo y más complejo que la clásica porque profundiza más en la vida y personalidad de Alex Murphy, y aporta más credibilidad a la trama teniendo una fuerte carga sentimental, mucho más presente que en la cinta de 1988.
Aparte, la película recupera al robot ED-209 dotándole de un sentido más lógico que la función que se supone debía cumplir en la película clásica. También se añaden nuevos robots a la historia; y la empresa que los fabrica y que, por ende también crea a Robocop, adquiere en esta película una mayor claridad ya que te explican muy bien a que se dedica, porque surgen sus proyectos y cuáles son sus oscuros proyectos de futuro. 
Igualmente, la película no se limita solamente a la acción sino que se acerca más al género de cine negro o cine policiaco de investigación, traición y secretos ocultos; todo el guion está plagado de matices de este género de cine y lógicamente te atrapan más pues existe una historia sencilla pero compleja detrás de lo que es presentar solamente a Robocop para combatir el crimen.
Recuerdo cuando vi la primera imagen de la película y comparé con un Power Ranger el diseño del nuevo Robocop, es verdad, es negro, pero reconozco que aquella imagen engañaba y claro, cuando ves el final de la película… ¿Qué queréis que os diga?, no os lo desvelaré por supuesto pero… Bravo, bravísimo señor Padilha.
En definitiva, una muy buena película de acción que se acerca al género negro y policiaco. Respetuosa con la original, con la carga justa de humor, acción y dureza. Con continuos gags a la cinta clásica, con respeto a la banda sonora original, con respeto a la base argumental original y en resumen… hecha con cariño, hecha para los fans, pensada para que el público actual pueda conocer una historia que antaño algunos pudimos disfrutar con otros ojos, y ahora podemos recuperar manteniendo el cariño a aquella película de 1988, más bien de serie B, pero reconociendo la mejora en muchos aspectos en esta nueva versión de Robocop.
Siempre lo he dicho, una cosa es hacer una revisión de una historia y un personaje aportándole una mayor complejidad y riqueza, tratado de mejorar puntos débiles y otra muy distinta es coger la historia original y pasársela por el forro para hacer una trama completamente nueva y sin sentido que solo busca explotar el nombre de éxito de la franquicia en cuestión. En este caso, Robocop, acierta y se convierte por fin…., creo que en el único para mí, remake o reboot actual que vale la pena. Eso sí, echo en falta algunas cosinas como las directrices, pero bueno, están implícitas y ya sabe que a buen entendedor pocas palabras bastan. Recomendable 100%

Nota: 8,5