Toca una de ciencia ficción, mi genero favorito, y en esta ocasión
los extraterrestres llevan la voz cantante. Distrito 9 es una
interesante y peculiar película que, o te gusta o la odias.
Particularmente, a mi me ha gustado, y es que la extraña combinación de
rodaje que tiene esta cinta la convierte en algo recomendable para
visionar.
Cuando digo extraña combinación, hablo obviamente de cómo se ha
enfocado la historia; realmente se podría decir que es un documental sin
serlo ya que la trama discurre mediante un reportaje realizado por una
serie de personas que comentan la historia del protagonista y
desarrollan la trama de los extraterrestres.
Pero no liemos la madeja, empecemos por el principio. El argumento de
la película cuenta como una raza alienígena llega a nuestro planeta sin
intención hostil, son una especie de refugiados que encuentran La
Tierra y, sinceramente, no me queda muy claro si es que llegan por
accidente o si lo tenían planificado. El caso es que los gobiernos del
mundo, acuerdan darles asilo allí donde se encontró su nave nodriza, la
ciudad de Johannesburgo, construyendo una zona especialmente destinada a
los extraterrestres y que recibe el nombre de Distrito 9.
La película no cuenta estos acontecimientos, ya que nos sitúa 20 años
después de la llegada a la tierra de estos vecinos espaciales; 20
largos años en lo que ha sucedido de todo. Al igual que la sociedad
humana, son millones los alienígenas que habitan en el distrito 9 y como
todo ser vivo, tienen unas necesidades básicas, lo que provocó que
pronto naciera el contrabando, la prostitución entre razas (Sí, no me
digáis como), la venta ilegal y el mercado negro… y como todo se forman
grupos de extraterrestres buenos y malos, pero eso es otra historia.
La cosa está, y por no extenderme mucho, en que un científico que
investiga la evolución de dichos seres, en colaboración con el
ejercito, sufre un accidente que le obligará a acercarse mucho más que
nadie a los extraterrestres. Estos poseen una tecnología armamentística
muy avanzada, y que los humanos, mejor dicho, los gobiernos y la
industria privada de armas, pretenden controlar; y es precisamente este
hecho sobre el que gira la cinta, pues las armas extraterrestres solo
pueden ser usadas por los mismos mediante un mecanismo de ADN.
La película resulta un tanto extraña al principio, las cosas no
quedan claras y los planos no son precisamente una obra de arte. Claro
está, posiblemente esto se hiciera a propósito, pues como dije antes, al
principio parece un documental grabado por un aficionado. Pero cuando
avanza la trama, nos encontramos ante un producto cinematográfico a
tener en cuenta, pues de un momento a otro cambia radicalmente la acción
dando lugar a acontecimientos inesperados más propios de la fantasía,
en este sentido, no puedo evitar encontrar cierta similitud con “Independance Day”,
que comienza como una película seria con la destrucción de la humanidad
inminente, y acaba con Will Smith pilotando una nave espacial.
Yo creo que la película encierra un mensaje especial, no por ello
distinto a los demás; que los humanos somos unos miserables, sobre todo
la industria y los gobiernos. Llega a resultar aburrida durante unos
instantes, pasados unos 20 minutos, pero enseguida recobra el interés
cuando se descubre la trama que se esconde tras el protagonista; un
protagonista, por cierto, un tanto… llamémoslo “idiota”.
Idiota porque hay cosas que no llego a entender y actos que me
resultan más que absurdos. Por ejemplo, si me están buscando miles de
militares y empresas con supertecnología y aparatos de todo tipo vía
satélite, yo no uso el móvil. Tampoco creo que sea normal la relación
que se establece entre el protagonista y uno de los extraterrestres… Tan
pronto soy tu amigo, como el mayor enemigo, como el peor entre los
peores. ATENCIÓN SPOILER
Hay un momento en la película que me hace mucha gracia, el
extraterrestre iba a ayudar al protagonista a volver a la normalidad (no
digo el que), pero tardaría varios años y para poder ayudarlo en
condiciones, debía partir en su nave espacial, a su planeta de origen y
llevárselo con él. Supuestamente, este dato de los años no lo sabía el
protagonista y se enfadó porque no quería tardar tanto en curarse… le
dio un golpe al marcianin y se metió en la nave espacial del mismo,
posteriormente la arrancó y dejó al marcianin solo ante el ejercito…
Vamos a ver, ignorante, ¿Qué esperabas hacer con la nave? ¿Irte al
espacio? ¿Cómo tenías pensado curarte?… en fin FIN DE SPOILER
Salvo una escena como esta, un tanto absurda, y alguna que otra “ida de pinza”,
la película es recomendable, bajo mi punto de vista, a cualquiera que
le guste el género de ciencia ficción y los extraterrestres, pero es sí;
abstenerse quienes quieran acción y matanza continúa entre razas, pues
la película se intenta centrar más en las posibles relaciones de humanos
con extraterrestres, que en la acción mata – mata y quizás por eso, a
muchos les haya echado para atrás.
Buenos efectos especiales, criaturas
creíbles y una original forma de rodar, hacen que esta cinta valga la
pena; al menos, yo se de muchos que pasarían una buena tarde viéndola.
¿Peliculón?, pues no; ¿buena película?, yo creo que sí.
Nota: 7.8