Sí, pese a lo que muchos críticos repipis creen, Los Mercenarios 2 es una cinta espléndida, un homenaje al cine de acción de los 80 como dios manda. Como se agradece ver una película así en el cine, sin más pretensión que hacer disfrutar a los espectadores reuniendo en pantalla a una serie de monstruos cinematográficos y no dejando momento para respirar ni un instante durante los 100 minutos de metraje, 100 minutos que se me hicieron cortos, demasiado cortos.
La película arranca con una secuencia de acción de casi 15 minutos que deja los pelos de punta, una escena que ya indica al espectador que es lo que va a ver durante el resto de cinta. Un caos y una matanza descontrolada que hacía mucho tiempo que no veía en una película y muchísimo menos realizada de la manera que se hizo, pues la espectacularidad de la misma no está reñida en absoluto con cómo se rodaban las escenas de acción en los años 80 (Menos ordenador y más inteligencia).
La cinta es un constante homenaje a todas las películas que en los años 80 triunfaron e hicieron las delicias de todos, consigue una cosa muy sencilla pero a la vez muy complicada y es que teniendo una trama realmente escasa, esta queda absorbida por lo que de verdad importa en el film, la reunión de toda una banda de poderosos colosos del cine que regresan para hacer lo que mejor saben sin pretender, ni por asomo, alcanzar el Oscar al mejor guión que, por otra parte, me parece magnífico dentro de su contexto pues está cargado de chistes y auto parodias ingeniosas que al contrario de lo que opinan otros críticos, a mí me han sabido a poco, y si puedo echar de menos algo en la película es precisamente más metraje, más frases y más desarrollo para cada uno de los grandes actores que componen el reparto.
Esta película demuestra lo que algunos han olvidado, que el cine además de un arte es también un espectáculo y que por lo tanto este tipo de cintas se hacen necesarias, pues su contenido tiene mayor importancia que la historia y sinceramente, si para que una película sea buena su guión tiene que ser intrincado, dramático y con giros inesperados, permítanme que deje de ir al cine, porque películas como estas ya no se hacen y menos que la historia principal quede en un segundo plano; que en mi opinión además, aventuro a asegurar que se ha hecho adrede.
El que no suelte una sonrisa durante la película, el que no vea lo que yo trato de decir en esta crítica y el que no sea capaz de admirar lo que supone una cinta como esta, sencillamente no es fan de las películas de acción y miente si dice lo contrario. Dentro de su género, es sencillamente única, no hay parangón. Esta entrega además, es mejor que la primera pues en aquella grandes rostros como los de Swarzenegger o Willis, aparecían únicamente unos minutos y también el grupo principal estaba más “dividido”, lo cual no hacía brillar como merece a cada uno de lso protagonistas y como ejemplo un botón, en esta segunda película se luce mucho más Jet Li saliendo mucho menos que en la primera entrega.
Pero vamos con lo que vamos, el reparto. Sinceramente yo no tengo recuerdo de algo más épico en la gran pantalla, en la cinta encontramos a Silvester Stalone, Arnold Swarzenegger, Chuck Norris, Jason Statham, Dolph Lundgren, Jean Claude Van Damme, Bruce Willis, Jet Li, Randy Coutur, Terry Crews, Eric Roberts y Liam Hemsworth entre alguna que otra sorpresa más. Todas y cada una de las aparciones de estos titanes en la pantalla es digna de ser recordada, pero si hay que destacar alguna aparición estelar sin duda ninguna es la de Chuck Norris; espectacular. Haciendo gala de su estilo, y recurriendo al auto parodia, aparece de la nada como un ciclón destruyendo todo lo encuentra a su paso y dejando más claro que nunca su merecido renombre. Tampoco queda atrás la aparición de Swarzenegger y su escena compartiendo plano y metralleta con el señor Norris, francamente impagable.
Jason Statham también tiene un par de momentos “Transporter” llenos de épica y la pequeña intervención de Jet Li es mucho más potente que lo que vimos de él en la primera entrega. Las coreografías de combate son muy buenas, realmente me dolían las hostias, y tengo que añadir que Jean Claude Van Damme como malo me ha parecido espléndido, aunque me haya dado cierta pena verlo en este rol, tengo que decir que ha cumplido con creces (que cabrón ^_^).
Tal vez la parte negativa, por decir algo, y siempre como opinión personal, sea el hecho de que el señor Van Damme contaba con pocos aliados de renombre, me hubiese gustado ver algún rostro potente más como lacayo de este villano que tiene un combate memorable al final. Por lo demás la película es todo cuanto promete: máxima acción hasta el final, unos grandes diálogos que hacen las delicias de los más ochenteros, unas secuencias a la antigua usanza de las que te dejan sin respiración, muy buenas coreografías de lucha, tiros y explosiones por todas partes, violencia llevada al límite y acción frenética de principio a fin.
Todo aquel que haya disfrutado con las cintas de estos colosos en el pasado (Eraser, Rambo, Jungla de Cristal, Terminator, Comando, Difícil de matar, Blanco Humano, Delta forcé…) va a salir del cine temblando con una sensación de haber invertido su dinero bien su dinero en la entrada. Ahora bien, aquellos adictos al drama que busquen una historia profunda con un guión denso y detallado, que se abstengan porque no serán capaces de llegar a comprender la complejidad de un proyecto tan hermoso y con tan buena intención de agradar al espectador como es Los Mercenarios 2.
Gracias Stallone, gracias por hacerlo posible, espero con ganas la tercera entrega en la que más que seguro veremos incorporaciones como Steven Seagal, Wesley Snipes e incluso el mismísimo Clint Eastwood; Madre mía lo que puede ser eso… Lo dicho, una esplendida cinta de acción a la antigua usanza, un homenaje sincero a un cine ya extinto que gracias a este tipo de acciones parece volver poquito a poquito a las carteleras, ojala sea así. Nos vemos en el cine.
Nota: 9